Poco importó el resultado. En la noche del martes en el Argentina Open, la figura de Juan Martín del Potro acaparó todas las miradas y llenó de emoción a cada una de las personas que estuvieron en el Buenos Aires Lawn Tennis Club. Allí, la Torre de Tandil cayó ante su amigo Federico Delbonis (42°) por 6-1 y 6-3, en la noche que, como describió el tenista hace unos días, fue “más una despedida que una vuelta”.
El encuentro entre los argentinos generó muchas emociones. La Torre de Tandil quebró en llanto en el segundo set y fue ovacionado por el público. Le costó mucho ir hacia la red, y en varias ocasiones, no pudo llegar. Delbonis, que confesó que hasta él quería que Juan Martín ganara, tuvo 5 break points a su favor y ahora jugará en octavos de final ante el español Pablo Andújar.
Considerado, Delbonis cedió el lugar de protagonismo que suele dar el triunfo y hasta apuró su camino al vestuario tras dejar algunas palabras para la televisión. Las lágrimas de Del Potro erizaron la piel de todos mientras se oían los cantos de aliento “Olé, olé, olé, Delpo, Delpo”. Tras el llanto y el desahogo, Delpo dejó su vincha colgada en la red y la despidió con un beso. Abrazó a su mamá y dijo algunas palabras a la prensa:
“Hoy di todo lo que tenía hasta el último punto y estoy tranquilo conmigo. Mi último partido fue delante de la gente y no en una conferencia. Lo voy a recordar siempre”.
“Fue la primera vez que mi mamá vio un partido mío y tenía la ilusión de que mi papá también esté”.
“Son esos días que voy a recordar para toda mi vida. Todavía no encontré un lugar en el que sea más feliz que acá adentro. Y por eso quería jugar acá. Al torneo lo veía por tele y no encontré mejor lugar para hacerlo que acá”.
“Doy un paso al costado hasta que pueda mejorar mi pierna, pero la ventana para volver siempre la voy a dejar abierta”.
“Lo que sí está claro es que juegue o no en Río, voy a hacer un parate para recuperar mi rodilla y vivir sin dolores por más que no juegue al tenis. Quiero disponer de mi cuerpo para hacer lo que quiera y no lo que pueda”.
Fotos: Sergio Llamera y Prensa Argentina Open
