En su cumpleaños número 29, Andy Murray finalmente pudo frenar a Novak Djokovic en su intento de un tricampeonato en el Internazionali BNL d’Italia y terminó la racha dominante del serbio en su rivalidad FedEx ATP Head2Head. Triunfó 6-3, 6-3 en una hora y 36 minutos, asegurando en Roma su 36ª corona en el circuito.
Pero aún más importante es la gran comodidad de Murray sobre esta superficie. El escocés ha conseguido su segundo torneo ATP World Tour Masters 1000 en arcilla, superficie en la que se creyó durante mucho tiempo que era más débil. Con un arsenal de nuevos golpes en la tierra, el británico mejoró a un impresionante récord de 29-3 en los últimos 13 meses.
“No esperaba tener los resultados que he estado logrando en tierra batida”, admitió Murray después del partido. “Pero si realmente vemos los últimos resultados, he tenido la oportunidad de llegar a la final de Montecarlo y llegar a la final acá. Serví para el partido contra Novak hace unos años acá y también tuve una oportunidad contra Rafa hace unos años. Tal vez yo no creía lo suficiente en mí mismo. Siempre pensé que la arcilla era la peor y más dura superficie para mí pero el año pasado conseguí algunas victorias contra los mejores jugadores y eso me hizo comprender un poco lo que podía hacer. Siempre me había dicho que la arcilla en realidad debería ser mi mejor superficie pero me tomó mucho tiempo ganar un poco de confianza. También me hizo hacer grandes mejoras en mi movimiento en la superficie. Eso ha cambiado mucho mi mentalidad cuando voy a la cancha. No siento más como si estuviera fuera de balance y creo que puedo alcanzar la mayoría de las pelotas bajas. Es una superficie fácil para moverme ahora”, aseguró el escocés.
Murray dice que da crédito a sus entrenadores para la implementación de un nuevo programa de entrenamiento que ha permitido que se sienta más cómodo. El jugador de 29 años cree firmemente que ahora es una amenaza en todas las superficies.
“En el último par de años, la arcilla ha sido probablemente mi superficie de más éxito, algo que nunca pensé que fuera el caso, pero no me quejo. Voy a Roland Garros con mucha confianza y muy buena preparación. Siento que estoy en el camino correcto. Así que espero poder tener una buen torneo allí”, comentó.
Tras volver al No. 2 del mundo en el Emirates ATP Rankings, Murray ya fija su atención en el segundo Grand Slam del año, donde que busca continuar con su fuerte racha de resultados.
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